O Guarani

mito de fundação da brasilidade

Resumen

José de Alencar escribe “O Guaraní” como una representación ficticia, llena de la mayor cantidad de información posible para hacer creíble una intención desesperada. Indios, bosques, animales salvajes: el escenario de la romantización europea era un exceso, su presencia asfixiante nos abrumaba. Suele decirse que el indianismo de José de Alencar trató de eliminar esta molestia. Pero ¿ve sólo a un indio idealizado, despojado de sus verdaderas cualidades? Creo que no. Leyendo la novela con atención, nos damos cuenta de que las cosas son más complejas. El nacimiento de Brasil no es simplemente el cruce de la cultura con la naturaleza, sino de una cultura particular con una naturaleza domesticada. La pregunta de Alencar es cómo introducir la civilización en un dominio que le es ajeno, problema radicalmente diferente al descrito por el romanticismo europeo. "El guaraní", como los mitos primitivos, encuentra en la figura del incesto (la unión fraternal de Ceci y Peri) el artificio para la fecundación de un nuevo orden, pero es sobre todo una novela de las aguas, donde la imagen de lavando las impurezas, impregna la narración de principio a fin.